¿Un crimen de Lesa Humanidad?

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        He anotado cuidadosamente el nombre de cada diputado, senador o funcionario que avale los artículos 425, 438 y 439 del proyecto de presupuesto nacional. Ya llegará el momento de llevarlos ante la justicia para delimitar responsabilidades, porque está claro que hay delitos que nunca prescriben.
      
         Si bien la situación del acceso de los uruguayos a los medicamentos y tratamientos terapéuticos de alto costo es desde hace años la mayor forma de discriminación ante el que carece de medios económicos,  estos artículos son la rúbrica de la infamia.
      
         En su anterior administración, el Dr. Tabaré Vázquez llevó adelante una exitosa batalla en contra del cigarrillo que seguramente ahorrará miles de vidas.  Hoy gastamos dinerales en estupendas campañas de prevención del cáncer, pero cuando alguien se enferma le negamos la posibilidad de realizar un tratamiento que le devuelva la salud.
        
        Si eso no es absurdo, díganme en donde está el absurdo.
        
        Sabemos que la tercera parte de la población mundial no tiene acceso a los medicamentos y esto debería preocupar a todos los países. Uruguay llevaba años siendo un ejemplo con la creación del Fondo Nacional de Recursos, pero nos ganó la irresponsabilidad, hermanada con la corrupción.
        
        Porque si bien es cierto que la industria farmacológica es responsable de los altos costos de mantener la salud, también lo es que los gobiernos con sus permanentes políticas clientelistas y sus acuerdos “privados” con fabricantes de placebos, son hoy igualmente responsables.
        
         En este siglo 21 las políticas de salud adoptadas por nuestro país  implican un crimen de Lesa Humanidad que no debemos permitir. Sabemos que nuestros gobiernos han sido más afectos a subsidiar la cerveza, financiar  giras innecesarias o perder millones de dolares en aventuras inviables que pagarían miles de tratamientos oncológicos. 
            
          Así es que hoy presenciamos la destrucción de los antiguos sistemas de salud que amparaban a los más vulnerables de nuestros conciudadanos. Enfermarse en Uruguay es muy caro y la tendencia parece ser dejar morir a los enfermos pobres, que son la mayoría con lo cual la corrupción deviene en un crimen flagrante.
          
          El Diccionario de Acción Humanitaria define al exterminio como la privación de la vida a un grupo de personas inocentes, comprendiendo la imposición intencional de penosas condiciones de vida, y la privación del acceso a alimentos o medicinas entre otras acciones, encaminadas a causar la destrucción de una parte de la población. El exterminio está estrechamente relacionado con el genocidio, ya que ambos se dirigen contra un gran número de personas. Ahora bien, el exterminio se da en casos en que se mata a grupos de personas que no comparten características comunes o cuando se mata a algunos miembros de un grupo pero no a otros. (Por ejemplo si sos hijo de un Senador te dan medicamentos pero si sos hijo de un portero, te morís) 
          
         Nunca como en estas últimas décadas se ha hablado tanto de los derechos humanos, tampoco jamás se invirtió tal volumen de dinero en aclarar las violaciones del pasado, crear Institutos, museos, fundaciones, excavaciones, resarcimientos y más. 
          
          ¿A donde están los integrantes del Instituto de Derechos humanos?
          
         ¿Es que  nadie les ha dicho que el derecho a la vida es un derecho fundamental?
         
        Lamentablemente de este nuevo y sofisticado sistema de extermino en masa, no han dicho esta boca es mía.
        
Mercedes Vigil

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El velo: una discusión intrascendente.

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 Es notorio que la mejor forma de no solucionar un problema en desviar la discusión sobre temas accesorios, costumbre cada vez más generalizada. En Uruguay la quita de los crucifijos de los hospitales no fue una medida prohibitiva sino libertaria. Cada individuo podía acompañarse del símbolo religioso que le identificaba o, de así preferirlo, de ninguno. Ahora, un occidente crispado cuestiona el uso del velo. Yo les digo que jamás admitiría  que me prohíban usar mi cruz cristiana, en ningún tiempo ni espacio. Tampoco acepto que alguien se abrogue la potestad de decidir cuál símbolo religioso puede usarse, se trata de una opción personal e íntima. He tenido el privilegio de recorrer Medio Oriente y brindar conferencias ante decenas de intelectuales musulmanes vestida igual que en los EEUU. Como siempre, llevaba la cruz que heredé de mi abuela pendiendo del cuello y nadie me hizo sentir diferente.

          Quienes hoy se erigen en jueces de lo que debe ser o no un símbolo para el islam deberían recordar que hace 300 años la iglesia católica consideraba que las mujeres no teníamos alma, que el baño era pecado y vaya a saber cuántas cosas tan o más definitivas que el velo. Ni que decir que Las Cruzadas solo son el mojón mas publicitado de los horrores que el hombre ha cometido en nombre de Dios.

            Para tratar este tema hay que conocer íntimamente el significado de ese trozo de tela que resguarda la moral interior de la mujer musulmana.  ¿Perjudica a alguien? Absolutamente no. Muchos han esgrimido motivos de seguridad y yo los invito a observar lo que acontece en el mundo. Personalmente  he recorrido muchos aeropuertos viendo a mujeres musulmanas levantar su velo frente a los empleados de migración y a las cámaras de identificación facial sin problema alguno. O sea que  el velo no trae dificultades a la hora de identificar al pasajero.

          Pero como no hay mejor cosa que la experiencia, recuerdo que Nicolás Sarkozy tuvo la mediática idea de realizar una campaña de prensa en contra del uso el velo. Lo único que logró fue que miles de mujeres musulmanas abandonaran los centros educativos. El entonces presidente francés debió considerar que la educación ha sido el mejor vehículo  para que las minorías alcanzaran la igualdad.Como si esto no bastara es un hecho conocido que en Francia y en algunas alcaldías españolas, se ayuda económicamente a ciertos grupos islámicos en la diáspora, muchos adherentes confesos a organizaciones  terroristas.Es allí en donde debemos trabajar y no en el uso de un trozo de tela.

        Para rematar les diré algo que aprendí con motivo de mi trabajo sobre Los asesinatos de honor en el Kurdistán, territorio que se extiende entre los macizos montañosos del sur del Cáucaso, los montes Tauros, Zagros, el monte Ararat y la meseta de Anatolia oriental.  En esa región que toma territorio de Irán, Turquía y Siria viven los yazidíes, pertenecientes a una minoría religiosa insertada dentro de la minoría étnica kurda. Allí la violencia es moneda corriente como consecuencia de las pugnas religiosas y la conjunción de intereses soviéticos, británicos, estadounidenses y persas. Los yazidíes son el fruto de una ramificación del Islam que se desgajó tras la caída de los Omeyas. Sus mujeres visten a la usanza occidental y no llevan velo. Sin embargo es en ese grupo, quizás el más reaccionario de la región, en donde la pena de lapidación esta más vigente y actualmente se realiza con absoluta impunidad. Por consiguiente discutir el uso de un símbolo tan caro para la mujer islámica es como cuestionar si yo puedo llevar mi cruz.

         Lo que verdaderamente liberará a esas mujeres es la secularización de las sociedades del Oriente Próximo. Es allí y no en otro lado en dónde la intelectualidad debe trabajar. En este siglo 21 a nadie se le puede ocurrir sostener que poder terreno y poder divino deben estar en las mismas manos. Por eso me resulta inútil la discusión  sobre el velo, una cuestión menor que puede desviar la atención de aquellos asuntos medulares que mantienen a gran parte de la población mundial en la lista de los desheredados.


     Mercedes Vigil


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Un insulto innecesario

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“Vida útil de la era progresista": un insulto innecesario

        Aclaro que desconozco quien es el autor del editorial “Vida útil de la era progresista" publicado este miércoles 24 de junio en El País. Tras leerlo comprobé que, salvo escasas excepciones la estupidez es un valor agregado a la hora de escribir en la prensa nacional. No aliento esperanza alguna que estas líneas muevan a la reflexión a aquellos que carecen del sentido de la enorme responsabilidad que significa ejercer el periodismo. Esto es solamente un sacudón a la siesta nacional, pues si bien los uruguayos se han quedado mudos, mientras tenga voz me haré oír.
         Si bien coincido con parte del editorial, cuando promedia el mismo se incurre  en un error grave que solo un principiante puede obviar.  Con estas líneas creo representar a todos los técnicos que trabajamos sin interés alguno en la elaboración del programa que acompañó estas últimas elecciones al candidato del Partido Nacional. Gente valiosa, con formación genuina, con gran sentido de la responsabilidad y que laboró con seriedad sin solicitar nada a cambio. Por ello, no puedo dejar pasar que el editorialista diga alegremente: “Se necesitan crear equipos estables y de alta capacidad técnica para las distintas tareas que debe abordar un partido político moderno. El Partido Nacional el período pasado instaló varios equipos para trabajar como un "gabinete sombra" que terminó en un bluff. La idea es buena y va en el sentido correcto, pero si su funcionamiento depende de la gente que voluntariamente quiera dedicarle su tiempo libre, lo que sucedió es lo que razonablemente tenía que pasar…”  
          Sencillamente esta parte del editorial me pareció de una ignorancia supina y una falta de respeto imperdonable. Sin duda  entre los más de 200 técnicos que elaboramos el proyecto que acompañó a Lacalle Pou hay nombres y trayectorias que no resisten tan  patético comentario.  Es más, propongo al mismo que publique la lista de genios que funcionaron como asesores del partido de gobierno y su programa. Me parece una afrenta injustificable que se nos sugiera aprender de ese grupo de miles de uruguayos que sin duda marcaron con sus votos el triunfo del FA. Pero no todos votaron  desde su inteligencia o responsabilidad, sino desde su bolsillo. 
 ¿Alguien sabe cuántos uruguayos dependen no ya del Estado sino del gobierno del Frente Amplio? Seguro que no, es una encuesta que la enorme cantidad de encuestadores nacionales NUNCA harán.
 ¿Que el Frente Amplio tiene buenas estrategias? Seguro.
 ¿Que se compitió contra el Estado y no contra el Frente Amplio? Evidente.
 ¿Que el Partido Nacional cometió muchos errores? Por supuesto.    
  Las responsabilidades son varias, pero decir que la calidad y el compromiso del grupo técnico que apoyó a ambas fuerzas políticas definió el resultado de la elección es una afrenta que personalmente no pienso tolerar. El programa del partido Nacional era infinitamente superior al del partido de Gobierno, pero en los gobiernos populistas los votos se compran, y no precisamente con ideas.  
   

     Mercedes Vigil



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ACEVEDO Y SU ÁBACO

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ACEVEDO Y SU ÁBACO

             Hace días que no me ocupo de la prensa ni del blog debido a mi trabajo. Sin embargo, la cantidad de mensajes que he recibido como consecuencia de cierta munición liviana aparecida en La República el sábado pasado motiva un breve paréntesis en mi tarea.
        
             No me interesa lo que vomita Acevedo cuando la envidia se le vuelve bilis al comprobar que no ha logrado culminar decorosamente ni la lista del supermercado. 
Tampoco me hago cargo de las alucinaciones que lo asaltan en la redacción de La República al descubrir en qué se ha convertido con los años. Acevedo es un viejo comentador de obra ajena y oportunista sin pudor. Se le nota que de tanto querer y no poder, ha perdido hasta la capacidad de sumar y la inteligencia para establecer una línea de tiempo.     

         Esto no es nuevo, sus problemas con el manejo temporal comenzaron hace muchos años cuando publicó una crítica sobre un libro mío… 24 horas de que saliera de imprenta ¡¡¡

          Ahora, ha perdido definitivamente el ábaco y me tilda de colaboracionista con una dictadura que me encontró muy niña. Como lo sé obstinado hasta el ridículo, imagino que pronto escribirá que también colaboré con golpe de Estado de Gabriel Terra en 1933¡¡¡
          Por eso les ruego no desperdicien su tiempo en enviar a mi blog comentarios sobre sus garabatos. No los he de publicar, se trata de un ser oscuro y resentido a quien seguramente la hiel acumulada en su hígado le dará muchos dolores de cabeza.
         Buen fin de semana
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